Descargas eléctricas en la Catedral de Barcelona

29 julio, 2009
Fotografía:  qfwfq78

Fotografía: qfwfq78

No piensen mal. No son descargas para aquel turista rezagado que se ‘olvida’ de que la catedral va a cerrar. En realidad están preparadas para las palomas y las gaviotas. Por lo visto, la corrosión que producen los excrementos de estas aves estaban poniendo en peligro algunas partes de la fachada del edificio.

La solución: instalar un sistema eléctrico en cada una de las esculturas y ornamentos de la parte exterior de la catedral barcelonesa que, precisamente, hace varias semanas ha vuelto a ‘asomarse’ a la ciudad después de cinco años de intensos trabajos de restauración, financiados por el propio Cabildo catedralicio, el Ayuntamiento de la ciudad, la Generalitat catalana, donaciones particulares y el precio de la entrada para visitar el recinto (5 euros).

Fotografía: radamantis_t

Fotografía: radamantis_t

Con un coste aproximado de unos 13 millones de euros, era lógico que se cuidara ‘in extremis’ evitar que palomas y gaviotas continuaran posándose en zonas de un limpio inmaculado. Desde el Cabildo se asegura que las descargas son ‘flojas’ y que no hacen daño, únicamente las asusta .

Fotografía: laura padgett

Fotografía: laura padgett

Mientras se estudia si la medida tiene el efecto deseado, los trabajos de reforma continúan, en este caso, tanto en el cimborrio como en el pináculo de hierro,  desmontado pieza a pieza, que también había sufrido un proceso de oxidación. Otros dos años habrá que esperar para que la Catedral de Barcelona, que comenzó a construirse en el siglo XIII, pueda ser contemplada en todo su esplendor.

De todas formas, me pregunto si para ‘despistar’ a las aves, no hubiera sido mejor utilizar otros métodos menos drásticos, por ejemplo mediante ultrasonidos. ¿No lo creen?. 

Vía|ABC

Más info|Ahuyentando palomas en el Ritz