Fotografía: Panoramas
Se trata de la antigua capital de la región de Champagne. Cuenta con muchos edificios religiosos finamente diseñados, perlas de la arquitectura francesa que son un deleite para la vista. Las calles son estrechas y encierran a casas antiguas muy bien conservadas o restauradas, en su mayoría. Cuenta con museos renacentistas y una catedral de estilo gótico que deja atónitos a los visitantes por su belleza y desafiante arquitectura.
El camino más popular entre los turistas es el que lleva desde la estación de Troyes hasta la catedral. Es un recorrido simpático y emocionante que tiene en a las antiguas iglesias del lugar su mayor atractivo. Se pueden apreciar recintos como San Pantaleón, Santa Magdalena, San Juan au Marché y la basílica de San urbano.
Fotografía: AchimF
El museo de arte moderno está situado en lo que antes era el Palacio de los Obispos y en su interior se pueden encontrar obras de Degas, Courbet, Matisse, Rodin.
Los recuerdos son de lo mejor, compralos en la rue Émile Zola y en la rue Champeaux. En estos lugares podremos realizar nuestras adquisiciones con total seguridad y complacencia, pues los objetos que encontraremos son preciosos y sirven perfectos como regalos.
