Un pueblo dentro de un lago

7 diciembre, 2009
Fotografía: Sara&Joachim

Fotografía: Sara&Joachim

El viaje a Ganvié es corto, pero tiene algo de irreal, como pensar en lo que uno va a encontrar: una ciudad construida sobre palafitos en medio del lago. Todo resulta extraño, sorprendente. Estamos en el lago Nokué, en el sur de Benín, un país pequeño y estrecho que aparece encajado entre Togo y Nigeria.

Pero aquí, en el lago, parecen muy lejanos los ruidos y los agobios de Cotonú. El Nokué tiene una 26.000 hectáreas de extensión, y dentro de sus aguas viven casi 40.000 personas en distintos poblados, de los cuales Ganvié es el más conocido.

A principios del siglo XVIII los reyes de Abomey y de Allada, de la etnia fon, habían encontrado una fuente de ingresos en el tráfico de esclavos y recorrían la zona en busca de pueblos sin protección. Los tofinu eran uno de ellos y encontraron la salvación adentrándose en el lago porque, por cuestiones religiosas, los fon no podían adentrarse en las aguas. Por eso Ganvié significa,  “Comunidad Salvada”.

Fotografía: Sara&Joachim

Fotografía: Sara&Joachim

Tres siglos después, todos los días se organiza un mercado flotante en el que se compra y se vende de todo de piragua a piragua y los niños van en lancha al colegio. Los pocos alojamientos que existen ofrecen una piragua para que los clientes puedan salir de la casa.

El desarrollo anárquico de Cotonú y de Abomey-Calavi ha hecho que estas ciudades crezcan hasta el borde mismo del lago, contaminando las aguas. Se cree que el aumento de los akaya, los recintos en el lago dedicados a la piscicultura, impiden la circulación del río Uemé hacia el océano. Ganvié, que siempre ha sido un ejemplo de supervivencia, se enfrenta a un nuevo reto.

Más información| Guía de Ganvié, Ganvié Wikipedia