Fotografía: chauletb
La apuesta moderna de la ciudad está encabezada por el KKL, el futurista centro cultural y de congresos que lleva la firma del famoso arquitecto Jean Nouvel. Se asoma al lago con una enorme ala cubierta de hierro que alcanza 35 metros sobre el lago.
Su sala de conciertos, que acoge actuaciones de música clásica y moderna, ha sido elogiada por sus magníficas condiciones acústicas. Desde cualquiera de sus butacas, el sonido que se percibe es siempre perfecto.
Fotografía: Björn ¨Söderqvist
Lucerna, además es un punto de partida para todo tipo de excursiones. Una de las más populares es la subida al Monte Titlis, que se puede acceder en tren por un espectacular paisaje alpino o bien en coche. Hay que llegar a Engelberg, donde se toman tres funiculares, el último, es el ‘Titlis Rotair’, que tiene como pecularidad, ser el primer teleférico giratorio del mundo con vistas sobrecogedoras de las montañas.
En la cima, a 3.200 metros de altitud, no puede dejar de visitar la cueva glaciar, con 3.000 metros cúbicos de hielo, juego de luces y con el mejor sonido. Los pequeños pueden disfrutar en el Parque Titlis deslizándose con hinchables por un canal natural de nieve o en trineo.
Y algunos datos de interés más técnicos. La compañía Swiss ofrece vuelos diarios a Zurich desde Barcelona, Madrid y Málaga, Palma de Mallorca y Valencia, con enlace a Lucerna en tren, con salidas cada media hora.
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