Fotografía:Capitrueno
La población de San Fernando (Cádiz), conocida como ‘Isla de León’, conserva un pasado irremediablemente unido a la historia política de España. La localidad, situada en el extremo más occidental de la provincia gaditana, fue baluarte democrático durante los años de la ocupación francesa, en el siglo XIX, y germen del proceso constituyente.
Esta ciudad y Cádiz capital se convirtieron en los dos únicos reductos de libertad política en un pais invadido por las tropas bonapartistas por aquella época. Precisamente, ahora que celebramos el 30 aniversario de la vigente Constitución Española, no está de más recuperar, desde estas líneas, la especial relevancia de la localidad isleña, y de paso, hacer turismo, que de eso se trata.
Siguiendo los pasos de los diputados que juraron las primeras Cortes constituyentes, nos adentramos en la Casa Consistorial. Fue allí donde se reunió la comisión preparatoria. El edificio civil mayor de toda Andalucía, de corte neoclásico, está situado en la Plaza del Rey y alberga la biblioteca del Almirante Lobo.
Fotografía: Capitrueno
Después nos trasladamos hasta la Iglesia Mayor de San Pedro y San Pablo, lugar histórico donde los haya, puesto que tuvo lugar del famoso juramento. El Real Teatro de las Cortes, antes Teatro Cómico, ( se celebraban habitualmente los carnavales), también es de obligada parada. Se sentaron las bases de lo que sería dos años después ‘La Pepa’, la primera Constitución española.
Dejamos a un lado el periodo histórico más político, para visitar algunos monumentos relacionados con otro de los aspectos más característicos de la Villa: el marinero. La peculiar situación geográfica, conectada a la península por el denominado Puente de Zuazo, y a Cádiz, por una lengua de tierra de unos ocho kilómetros, lo hizo un lugar geoestratégico defensivo de gran importancia y tuvo un papel relevante en la Batalla de Trafalgar.
Hoy en día sigue compartiendo patronazgo con la Armada española. El Museo Naval o el Panteón de Marineros ilustres, son prueba de ello.
Fotografía: Capitrueno
Y completamos este breve periplo con otras dos rutas posibles: la ruta de la sal, un recorrido por las marismas de esta parte de la bahía gaditana, para disfrutar de las casas y molinos de marea, y visitar una explotación salinera.
Hay circuitos que realizan recorridos en autobús, con posibilidad de degustar un buen cucurucho de camarones y un buen vino fino de la tierra, contemplando parajes como el caño de Sancti Petri. Y la ruta de Camarón de la Isla, visitando la Casa Natal del cantaor flamenco, la fragua donde trabajó su padre, la Venta de Vargas y el Mauselo.
Vía|Ayuntamiento de San Fernando
