Monasterio de Tatev. Fotografía: Wikipedia
Armenia inauguró el pasado 16 de octubre el teleférico más largo del mundo: su trayecto recorre la garganta del río Vorotan, cuyo punto más alto se encuentra a 330 metros, uniendo la aldea de Alidzon con el monasterio de Tatev del siglo IX y que se sitúa a unos 316 km de Ereván, la capital. El panorámico recorrido es de 5,7 km y se hace en solos once minutos y veinticinco segundos, frente a los 45 necesarios para quien lo hace por carretera.
El teleférico, que abrirá oficialmente el próximo 23 de octubre, ha necesitado once meses para su construcción y una inversión de 13 millones de dólares. Aunque en total se han invertido 45 millones de dólares porque todo esto hace parte del programa de Renacimiento de Tatev, de hecho fue restaurado también un molino de aceite del siglo XVII (que fue muy importante en el pasado para el abastecimiento de la región); pero se harán también obras de mejora en la carretera que lleva al monasterio, se construirá un nuevo hotel al lado de la estación del teleférico, unos cuantos hostales, museos y senderos turísticos.
Todo esto me parece muy bien, considerando que el monasterio de Tatev es el principal monumento histórico y arquitectónico de la región, aunque en 1931 un terremoto casi lo destruyó, pero hoy sigue en pie, para que todos lo puedan admirar.
Vía | latercera.com
